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lunes, 3 de marzo de 2025

Contra la pena de muerte

Me pasa muchas veces que las personas que me conocen quieren hablar conmigo de política, muchas porque buscan una interlocutora interesada en el tema o quizás porque quieren escuchar otro punto de vista.
Sin embargo me ha pasado últimamente que esas personas de mi total confianza y a quienes respeto profundamente, ante la impunidad y la frustración terminan deseando? apelando? justificando? la muerte de quienes cometen delitos graves, de lxs responsables.
Es difícil ver cuán enraizada está la pena de muerte, cuán poco parece valer la vida y cuán poco aprehendida está la idea que los derechos humanos son inherentes a la persona humana, sin importar quiénes sean, qué hayan hecho. Eso aprentemente tan sencillo del derecho a la vida por el simple hecho de ser un ser humano.
Es nada más ni nada menos que los artículos 1, 2 y 3 de la Declaración Universal. Eso que a veces parece tan obvio pero que es en realidad tan profundamente cuestionado por el modo en que vivimos.
Pienso que con sus falencias la Declaración Universal sigue siendo una gran herramienta de defensa de los derechos humanos, también creo que no nos podemos valer de la muerte de nadie para lograr el bienestar de todxs. Algo debería hacernos ruido cuando la muerte parece la única salida.

viernes, 5 de enero de 2018

15 años del Centro Cultural de la Cooperación o de los desafíos en 4 minutos

Comparto el borrador de mi breve intervención el pasado 22 de noviembre de 2017 en el marco de los 15 años del Centro Cultural de la Cooperación “Floreal Gorini” donde fui invitada a compartir unas palabras en torno a la batalla cultural desde la perspectiva de los derechos humanos.
¡Cuatro minutos máximo!
El resultado fue algo así:

Hoy a la mañana salí de una reunión un poco apurada por todas las cosas que tenía para hacer. Estuvimos planificando un taller de la comisión de asociados y acababa de darme cuenta que se me superponían dos actividades la semana próxima.
Necesitaba confirmar la fecha de un viaje la semana próxima, que también se superponía, y el celular nunca para de sonar. Una situación de estrés propia de esta época del año. Entonces yo venía preocupada, concentrada, a las corridas. ¡Y además pensando en qué iba a decir ahora!
4 minutos para hablar de 3 desafíos de la batalla cultural desde la perspectiva de los derechos humanos me daba a razón de 1 minuto 20 segundo por desafío. ¡Así es la instantaneidad de nuestros tiempos!
Pensaba hablar de los desafíos de los derechos humanos, citar algunos artículos de la declaración universal...
Y los nervios de saber quiénes me acompañarían acá. ¡y cuánta responsabilidad!

Venía pensando todo esto cuando entro al edificio, donde está la oficina de la APDH, y en el zaguán me encuentro con Mónica, una vecina que es siempre amorosa -esa es la palabra que la define-, la verdad es que no sé mucho de ella, debe tener unos 50 y largos. Estaba cuidando unas cosas de oficina en el zaguán.
Entonces como si nada, como esas conversaciones de ascensor, la saludo y le pregunto:
“¿Se están por mudar?”
Ahí su cara se transforma y con las lágrimas en los ojos me dice que no, que la sociedad en la que trabaja cerró, que se queda sin trabajo, que no sabe qué va a hacer, que justo en esta época del año, que con su edad no sabe si va a conseguir algo, que hace más de 20 años que trabajaba con ellos.
Y se larga a llorar y no sé qué decirle. ¿Qué le voy a decir?

Y a ella no le puedo decir más que mi deseo: que ya va a conseguir algo. La abrazo y sigo para la oficina.
Entonces pienso que están ahí, adelante mío, los desafíos de la batalla cultural en los que vengo pensando.

Es la batalla cultural para que el sentido común no sea la meritocracia sino el respeto a los derechos, para que el sentido común sea la empatía, la solidaridad y el que siga reclamando por memoria, verdad y justicia.

Esto quería compartir, por lo demás salió la nota en Página/12




miércoles, 2 de marzo de 2016

El error que termina en muerte es la ocupación

Suelo leer los diarios, y después de haber estado en Palestina, sigo las noticias sobre Palestina e Israel atenta.
Hoy Página/12 publica un artículo "Un error que terminó en muerte" para comentar un episodio en que dos soldados israelíes entran de noche en un campo de refugiados y son atacados.

El artículo obvia el contexto donde los jeeps israelíes con soldados armados para la guerra entran de noche en campos de refugiados y ciudades palestinas cotidianamente. Despertando a quienes viven en las casas, se llevan presos a sus habitantes sin órdenes judiciales, les tapan los ojos y atan las manos; a veces sólo lo hacen para amedrentar a las familias o como "ejercicios" militares: el ejercicio de amedrentar, maltratar y humillar a las familias palestinas en el medio de la noche. 

Quienes fuimos acompañantes en los territorios ocupados hemos visitado campos de refugiados casi a diario en algunas ciudades y siempre nos recibían sonrisas y abrazos de niños y niñas que viven en difíciles condiciones. Maestras y madres preocupadas por la seguridad de sus hijos e hijas nos contaban sobre las incursiones nocturnas de las fuerzas israelíes. Hemos visto niñxs aterradxs ante la presencia de soldados israelíes, con sus armas largas de guerra.
Nosotrxs no necesitábamos armas ni equipos de guerra para entrar porque íbamos a dar clases de inglés o a acompañar alguna actividad cultural o religiosa. Nos reconocían y nos invitaban a tomar té con menta y azúcar o un café en sus casas.

Los campamentos de refugiados existen desde 1950, son tantos que Naciones Unidas tiene una agencia específica: Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) y quienes hemos vivido en los territorios sabemos que cada día son más los desplazados de sus casas: desde el 48 los mayores, desde el 67 y cada día con la construcción del muro, las demoliciones de casas y tantas otras razones producto de la ocupación.

El error no es haber manejado en la dirección incorrecta, el error es seguir ocupando los territorios palestinos.  

viernes, 29 de enero de 2016

En defensa propia

- ¿Por qué es tan importante la Libertad de Milagro Sala? Si al final hay un montón de presos, me dijo.

Primero me dio bronca.
Bronca porque pensé que Milagro está presa justamente porque a nadie parece importarle.
Bronca porque a pesar de haber vivido los peores años de la historia argentina reciente no tiene idea de lo que es unx presx políticx.
Bronca porque sé que esa pregunta está repleta de prejuicios de clase y de color de piel.
Bronca porque tampoco creo que sea tan ignorante sino que sé de la maquinaria mediática, jurídica y política puesta al servicio de que Milagro esté presa.

Después hice un esfuerzo por explicar las razones jurídicas que no sirven -por más lógicas que sean- para hacer cambiar de idea a alguien que no está dispuestx a cambiar de idea, porque no le interesa escuchar razones.
Hice un esfuerzo por encontrar comparaciones que aclaren, que tampoco sirvieron porque siguió el alegato de declarar culpable antes que se pueda demostrar lo contrario.

La no conversación se terminó porque cuando alguien hace como que dialoga no funciona el diálogo.

Pero me quedé pensando:
¿Por qué quejarse, gritarlo y decirlo?
En defensa propia.

Primero se llevaron a los judíos, pero como yo no era judío, no me importó.
Después se llevaron a los comunistas, pero como yo no era comunista, tampoco me importó.
Luego se llevaron a los obreros, pero como yo no era obrero tampoco me importó.
Más tarde se llevaron a los intelectuales, pero como yo no era intelectual, tampoco me importó.
Después siguieron con los curas, pero como yo no era cura, tampoco me importó.
Ahora vienen a por mí, pero ya es demasiado tarde.
Bertolt Brecht

miércoles, 9 de diciembre de 2015

Solidaridad con el pueblo palestino

En el marco de la conmemoración del Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino en el Congreso de la Nación Argentina el pasado martes 2 de diciembre les comparto mi intervención.

El Comité Argentino de Solidaridad con el Pueblo Palestino está conformado por distintas organizaciones de la sociedad civil, organismos y referentes de derechos humanos, agrupaciones políticas, independientes, académicos, entre otros, que abrazamos la causa Palestina. No pretendo ni puedo hablar en representación de todos, pero creo que muchos compartirán estas palabras.

El Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino fue resuelto por la Asamblea General de la ONU en el año 1977.

Hoy, 38 años después seguimos solidarizándonos con el pueblo palestino,
porque las violaciones a los derechos humanos no han cesado,
porque los refugiados no han retornado a sus casas, cuyas llaves guardan como tesoros de generaciones,
porque las fuerzas de ocupación detienen administrativamente cada vez más hombres, mujeres, niños y niñas,
porque las colonias se siguen expandiendo contra el derecho internacional humanitario,
porque el muro avanza con cada bloque de cemento, separando a los niños de las escuelas, a los pacientes de los hospitales, a los monasterios como el de Cremisan.
porque se continúan esparciendo los puestos de control, los “checkpoint” que los hay fijos, volantes, repentinos, y casuales, obligando a los palestinos a cambiar su camino a casa, al trabajo.
porque las casas de las familias palestinas siguen siendo demolidas,
porque las bombas vuelven a caer en Gaza,
porque la ocupación de Palestina por parte del Estado de Israel sigue cada día.

En Argentina aprendimos del modo más doloroso que la memoria, la verdad y la justicia son derechos por los que hay que luchar. Sabemos que nunca es fácil pero es mejor cuando estamos acompañados.
Por eso nos solidarizamos con el pueblo palestino,
como un abrazo ante tanto dolor,
como un intento de poner el hombro para las lágrimas que no cesan,
como una mano tendida que aunque hoy no alcanza, ayuda al menos,
para expresarles que compartimos su deseo de una Palestina libre.
Que lo imposible solo cuesta un poco más.


Gisela Cardozo
Secretaria Coordinadora de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos.
Representante por APDH en el Comité Argentino de Solidaridad con el Pueblo Palestino.
Acompañante Ecuménica en Belén por el Programa Ecuménico de Acompañamiento a Palestina e Israel (PEAPI).

jueves, 3 de septiembre de 2015

Una recomendación: RiP!: A remix manifesto

Sigo en el curso de internet y derechos humanos y ahora es la clase (bueno ya fue... me atrasé) sobre un caso de internet y acceso a la cultura... y me acordé de una película que vi hace unos años ya que tiene mucho que ver con esto: RiP!: A remix manifesto ¿por qué?
(La recomiendo sólo si les gusta la música electrónica!)
Porque nos hace reflexionar sobre cómo construimos la cultura, por ejemplo la música, con el ejemplo del Girl talk!
Está buena para pensar críticamente el copyright, la cuestión del uso justo, la criminalización, el pasado, el presente y el futuro, entre otras cuestiones.
La película en sí misma retoma los problemas y amenazas al derecho acceder y disfrutar de la cultura y seguro que infringe copyright :P 
En la conferencia de Lea Shaver plantea con claridad, ¿qué podemos hacer? cambiar las leyes así de simple... así de difícil.

 

miércoles, 22 de julio de 2015

Los derechos humanos e internet


Como hace ya cuatro años cuando comencé con este blog ¡otra vez estoy haciendo un curso virtual! En esta ocasión es sobre derechos humanos e internet, no podía ser de otra manera.
Un hito del vínculo entre los derechos humanos e internet fue cuando, en junio de 2012, el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas dio cuenta sobre el derecho de las personas a acceder a internet y cómo internet puede colaborar en la garantía de muchos derechos humanos (derecho a la libre expresión, información, cultura, etc)
Pero también esta resolución, sin nombrarlo, nos recuerda que hay una nueva forma con internet de violar los derechos humanos por parte de los Estados.
Anoche vi Citizenfour, muy buen documental, recomendable y un puntapié para seguir pensando este tema.

jueves, 12 de junio de 2014

Cuando estás entre la felicidad y la impotencia

Suena el teléfono, como tantos días en la oficina. De un penal. De otro penal más donde los detenidos llaman para ver si podemos hacer algo. Está procesado, sin condena. Está en la cárcel y su causa no avanza. Se declara inocente, y lo es hasta que se demuestre lo contrario pero está preso hace más de dos años.

Suena el timbre en la oficina. Llegó por curiosidad o porque ya no sabe adónde ir. Quiere informacion de su familia desaparecida. Información que hace años busca, desde que recuperó su identidad.

Alguien hay que toma su denuncia. Lo escucha. Llama al penal. Pregunta en el juzgado. Apura trámites. Y del otro lado del teléfono vuelve su voz con mas preguntas pero con la tranquilidad que alguien escucha.

Alguien hay que lo invita a pasar a la biblioteca, a recorrer archivos originales con firmas de esa familia que falleció sin saber nada de sus seres queridos. Alguien le muestra declaraciones y ahora sabe dónde estuvieron su mamá y su tía.

Por cada unx de ellxs vale la pena. Aunque a veces sea poco y nos llene la impotencia. La felicidad y el agradecimiento de cada unx es especial, único.

A veces me cuesta aceptar el agradecimiento de alguien cuando se hace nada más -ni nada menos- que lo que corresponde.


lunes, 4 de marzo de 2013

En conserva

Cuando un grupo de veleros se organizan para realizar un viaje en conjunto se dice que van "en conserva". Es una buena idea para quienes somos principiantes.
 -
Hablan cada uno desde la banda de su velero, ambos tienen alrededor de 55 años y ese machismo típico de timonel clase media alta.
Hablan fuerte y es imposible no escucharlos a tan sólo unos 10 metros de distancia.
La primera cuestión es la queja de que "en este país entra cualquiera" seguida de la necesaria comparación con lo que pasa en Estados Unidos, porque "ese es un país serio".
No contentos con ejercer la discriminación a viva voz continúan con la política nacional.
Al principio, desde sus esperables lugares de machistas que no pueden concebir que haya mujeres que hacen política, tienen poder e ideología. Cuando esos argumentos parecen terminarse entonces empieza la evaluación de la política actual con las más ensombrecedoras predicciones.
Ni que hablar de las palabras dedicadas a los "pendejos que militan en política".
Si no los viera ahí a los dos, parados en sus veleros disfrutando el fin de semana, pensaría que ambos lo han perdido todo y que no les queda ni algo para comer. 
"Esto se está yendo todo a la mierda" dice uno y el otro, ya animado por el comentario del primero, sentencia que deben volver los militares porque no hay posibilidades que esto se "resuelva" con la democracia.
-
Me gustaría que cambie el viento, que venga una sudestada y se lleve sus palabras para el otro lado, pero hoy hay viento oeste y estoy ahí, escuchando cuán difícil es cambiar la sociedad y entendiendo que del muelle para este lado somos distintxs.

miércoles, 16 de enero de 2013

¿Cómo no iba a ser un cagón?

Nos juntamos a tomar un café en Corrientes y Callao.
Hace una década o más lo vi en una esquina de Plaza Italia y sin saber muy bien por qué, o por saberlo exactamente, le regalé una galletita de limón de esas que son como alfajorcitos.
Después siempre nos vimos, intermitentes.
Nos sentamos a la mesa y hablamos de la vida y de la muerte.
Hace poco tiempo su vieja decidió denunciar ante la CONADEP (hoy secretaría de derechos humanos) que la habían secuestrado junto con su marido y su hijo, él cuando tenía uno o dos meses. Ella antes no hablaba de lo que había pasado pero desde que pudo decir no deja de llorar. Él la acompañó y me cuenta los detalles: le dijeron a él también que llene el formulario para "las víctimas" y ahí se dio cuenta que era una víctima.
Sus viejxs estuvieron algunos días desaparecidos: torturas y simulacros de fusilamiento para que hablaran de cosas que no sabían.
Él, bebé, estuvo unas horas con los secuestradores que más tarde lo entregaron a los abuelos maternos.
A sus viejos los soltaron, hicieron la denuncia que 30 años más tarde su familia no recordaba y que la burocracia guardó para que él hoy pudiera tener el expediente y reconstruir lo dicho.
Después de lo ocurrido la mamá le contó que vivieron meses aterrados y encerrados en el departamento. Sin animarse a salir, con miedo.
Esos fueron para él los primero meses de vida. Me mira y se sincera: "¿Cómo no iba a ser un cagón?"

miércoles, 12 de septiembre de 2012

Tercer acto: el lugar de la memoria

Las ocho protagonistas se encuentran en la calle a la mañana temprano. Beben mucha agua.

1. Londres 38 es un centro de represión y exterminio de la dictadura pinochetista. Las baldosas negras y blancas que para muchxs serán inolvidables. La actualidad chilena que no deja espacio para dudar. Las baldosas de la entrada para no olvidar. La disputa es qué se recuerda.


2. Ex Clínica Santa Lucía, hoy funciona la Comisión Chilena de Derechos Humanos. Lugar donde se "curaba" a lxs torturadxs de la dictadura pinochetista, centro de detención y tortura. El piso está rojo, es por trapear la sangre.

3. Casa Memoria José Domingo Cañas. Lo perverso de haber tomado un lugar que sirvió a los asilados políticos y convertirlo en un centro de detención clandestino de tortura y desaparición forzada. Los puertos como lugares de encuentro y desencuentro.


4. Escotilla 8. Museo Estadio Nacional Memoria Nacional. Si Chile fuera el estadio, la escotilla 8 parece representar el lugar que tiene la memoria en la sociedad. Esa fue mi impresión: pequeña, terrible, encapsulada, negada. Con las fechas y nombres escritos de miles que ya no están. Conteniendo historias imposibles de soportar.  
Lo perverso de tener ahí, en la puerta, un parque de diversiones que dice: "Felicilandia. Adrenalina y vértigo". La adrenalina de vivir luchando para no olvidar.


5. Villa Grimaldi. Corporación Parque de Paz. El camino de la desaparición vs el camino de resignificación y de la vida. Los caminos que se encuentran. Los fragmentos de la memoria. 


Las lágrimas se agolpan en los ojos de las protagonistas. A veces nos hace falta llorar.
Baja el telón.

Primer acto: coloquio, coloquias, coloquiare

Cuatro días  y tres noches en Santiago, Chile, pueden ser suficientes para una obra teatral.

Coloquio sobre derechos humanos y educación organizado por el INDH.
Aprendizajes:
1. ¿Nadie sabe qué es un coloquio? Del latín colloquium dice mi diccionario: colloquium, ii, n. Coloquio, avocamiento, plática, conferencia. (pg 185 Ed. Valbuena, diccionario latino español) Me cansé de decir sinónimos cada vez que explicaba a qué estaba en Chile...
2. La investigación en grupo es un bicho raro. Las personas se asustan ante las multitudes. La idea de aprender investigando, esa obviedad, no es algo que lxs investigadorxs tengan muy claro. ¿No era que hay que partir de reconocer nuestra propia ignorancia para investigar?
3. Las preguntas son todas para nuestro grupo pero nos dejan para el final!! ¿Tanto les jode que sea más interesante? 
4. Tres investigaciones se presentan en una mesa. La coordinación se dirige a las personas de las tres experiencias: a. El profesor...  b. Ana c. As Mininas ¿Por qué el tipo es "el profesor", la mujer con nombre de pila aunque sea doctora y el grupo de seis licenciadas "as mininas"? Eso se llama machismo. Para el caso, machismo académico.
5. Les paso una de las ponencias sobre "Memoria y Dictadura" para compartir, es copyleft!

Las ocho protagonistas se retiran por la puerta a "La Piojera". Baja el telón.

sábado, 18 de febrero de 2012

Cuando faltan los derechos

El nos muestra las fotos de sus hijos, son cuatro, y dos de ellos son mellizos.
También nos lleva a recorrer las habitaciones del departamento: dos para sus hijos y una con la cama matrimonial.
Tony y sus padres nos invitaron a cenar e hicimos uso de la increíble hospitalidad palestina. Variedad de platos caseros, ensaladas, aceitunas de su tierra, aceite de oliva casero, verduras de su quinta y vino casero de sus propias uvas.
La hospitalidad es parte fundamental de la cultura palestina. Sin ella la vida sería imposible. Sin las sonrisas y las bienvenidas, la vida en los territorios ocupados sería aún más frustrante. Es la segunda vez en sus vidas que nos ven y nos abren las puertas de sus casas como si fuéramos su familia.
El té o café después de la comida.
El padre que hace artesanías de madera de olivos nos regala un camello hecho por él mismo y otras cositas para los que tienen hijos.
Es probable que no los veamos más pero eso no importa, cuando queramos volver ya han ofrecido su casa.
Para la cultura palestina la familia es fundamental. Casarse y tener hijos es un mandato cultural para hombres y mujeres. Hay quienes reniegan de eso y es difícil no ser tildadx de extrañx. Pero hay quienes dedican su vida como Tony.
Tony nos cuenta que comenzó a construir el departamento antes de conocer a su esposa y que lo agrandó para los niños que quería tener. Nos cuenta que cuando no había que pedir permisos para viajar, él conoció a su esposa en Nazaret.
Y entonces así como cualquier historia de amor, ella y él se enamoraron, se presentaron las familias y se casaron.
En las fotos él tiene 28 años y ella luce un vestido que, según nos cuenta Tony, ella misma ha hecho.
También están las fotos de los bautismos de los hijos y esas tradicionales fotos familiares.

"Es difícil estar solo", dice Tony mientras pone algunos troncos en el hogar del living donde estamos sentadxs.
Su familia vive en Nazaret, Israel, y él en Beit Jala, Palestina. A veces le dan permiso para ir a visitarlos, uno o dos días al mes pero él nunca sabe de antemano y es difícil planear con su trabajo.
Cuando tienen vacaciones, como Navidad o Pascuas su familia va a Beit Jala y se queda por algunos días. Es ahí cuando su departamento se llena de vida y todo es como debió ser.
Pero el colegio empieza otra vez y no es una opción para esta familia mudarse a Palestina, no quieren que sus hijos pierdan la ciudadanía israelí (y los derechos que eso implica). Porque quienes tienen documento palestino tienen que pedir permisos.
Tony tampoco puede mudarse con su familia a Nazaret, el estado de Israel no le permite la reunificación familiar a los palestinos que se casan con ciudadanos israelíes.
Así se le va la vida, deseando que su familia fuera como lo planeó. No le falta dinero para viajar, ni casa para sus hijos, ni trabajo. Lo que le faltan son derechos.

En Israel la ley prohíbe a lxs ciudadanxs israelíes la reunificación familiar con esposxs de los territorios palestinos ocupados. Esta ley afecta de hecho particularmente a lxs ciudadanxs israelíes de origen palestino. Esta legislación viola derechos humanos fundamentales como lo explica el artículo de Badil.
Por extensión los derechos de los niños de estas parejas se ven afectados. 

viernes, 27 de enero de 2012

Mujeres contra la ocupación y por los derechos humanos


Entrevista a Sylvia Piterman

Su celular no deja de sonar en toda la entrevista. Recibe llamadas tres veces por semana pero no alcanza, su línea colapsa más de una vez.
“Sos popular”, le digo y se ríe.
Con su hablar sereno y pausado, Sylvia explica y asesora. Esa es su “profesión” desde que se retiró de su otra profesión: economista. Dejó de trabajar para seguir trabajando contra la ocupación.
Llegó de Argentina a Israel en el año '66. Sus padres no estaban muy contentos con su decisión pero cuando la última dictadura militar empezaba a cercarlos, ellos también fueron a Israel en el '77.
Sylvia es reconocida en Machsomwatch1 por ser especialista en listas negras de los servicios de seguridad de Israel. Escucha cada caso y asesora. A veces en hebreo, a veces en inglés y un poquito en árabe.

Presentación y alguna introducción

¿Qué hace Machsomwatch? El trabajo con listas negras y permisos

La ocupación

Organizaciones mencionadas:
B'tselem Centro de información israelí por los derechos humanos en los territorios ocupados.
Ta'ayush Israelíes y palestinos luchando juntos para terminar con la ocupación israelí y lograr la igualdad a través de acciones-directas no-violentas.
ICAHD Comité israelí contra la demolición de casas.
Paz ahora en hebreo “Shalom ajshav”

Vocabulario:
-Checkpoint o puesto de control: los puestos de control se encuentran dispersos a lo largo y anchos de los territorio palestinos ocupados e impiden la libertad de movimiento de los palestinos. De acuerdo a UNOCHA actualmente hay 95 checkpoints: 9 sobre la línea verde, 60 en territorio palestino que funcionan permanentemente y 26 checkpoints parciales, es decir que no funcionan todo el tiempo.
-Oficinas de la administración civil: dependiente de la ocupación militar para asuntos de los civiles en los territorios ocupados. En estas oficinas se tramita la tarjeta magnética, algunos permisos en caso de urgencia y otros asunto de carácter civil. Estas oficinas emiten todos los permisos que son distribuidos a la población por intermedio de unidades de coordinación palestinas.
-Listas negras de los servicios de seguridad o Blacklists. De acuerdo a Machsomwatch hay alrededor de 180.000 palestinos en las listas negras de los servicios de seguridad israelíes.2
-Knesset: parlamento israelí.
-Area C: Los acuerdos de Oslo dividieron a Cisjordania en Area A, B y C de acuerdo al control civil y militar. El área C está bajo control civil y militar israelí y conforma el 62% del territorio palestino ocupado. Machsomwatch produjo un material audiovisual que se titula “Area C” (en mayo de 2010) que muestra en la práctica lo que implica vivir en área C para los palestinos.

1MachsomWatch Mujeres contra la ocupación y por los derechos humanos. “Machsom” en hebreo quiere decir punto de control o checkpoint.
2Invisible prisoners. Palestinians blacklisted by the General Security Services. Machsomwatch. Segunda edición 12/2009.

domingo, 25 de diciembre de 2011

¿Puede ser ilegal rezar?

Acabo de llegar del puesto de control 300 (Checkpoint 300) donde los acompañantes ecuménicos estamos cuatro veces por semana monitoreando, llamando cuando las filas van muy despacio o no dejan pasar la gente que va a trabajar, intercediendo ante los soldados cuando hay algo que podemos hacer, ejerciendo alguna clase de presencia protectora. Esto es desde las 4 am hasta las 8 am o hasta que no haya más gente esperando.
Muchos palestinos son musulmanes. Otros son cristianos.
Los musulmanes rezan unas cuantas veces al día por unos minutos. La primera oración es alrededor de las 5 am. Muchos de ellos están en el puesto de control a esa hora -antes de ir a trabajar-, es por eso que ni bien tienen algún espacio en el piso, en algún rincón, en la fila, donde pueden, rezan.
Miran siempre hacia un lugar en especial, rezan y se arrodillan. Ponen por momentos su frente sobre el piso y lo besan.
Todas las mañanas hay personas rezando en el puesto de control, en distintos lugares.
Hoy llovió y el único lugar seco era el área donde se accede a los detectores de metales. Pienso que por eso hoy eran más personas rezando adentro que afuera.
Estaba mirando cuando de repente desde la puerta de salida entran dos soldados y dos policías israelíes, empiezan a gritar y a empujar a las 40 personas que estaban rezando de rodillas. Los policías empiezan a empujar hacia afuera a los hombres que se levantaban y los hacen salir de la terminal, algunos alcanzan a ir a las filas de los detectores de metales.
Después de unos gritos más se van.
Cada vez que alguna persona empezaba a rezar reaparecían desde la salida de emergencia un policía y un soldado gritando y empujando, obligando a las personas a irse y dejar de rezar. A uno de ellos el policía lo levantó del piso donde estaba arrodillado agarrándolo de la campera, a los gritos.
Llamé a todos los números que tenemos: la línea humanitaria, al jefe del puesto de control.
La respuesta que obtuvimos del jefe del puesto de control fue que "el espacio tiene que estar libre, es ilegal rezar en este área y los palestinos lo saben".  "¿Pero por eso hay que sacarlos de manera violenta?" preguntamos. "No, eso no, estoy de acuerdo" contestó en el teléfono.
En toda la sala hay dos carteles, los dos indican salidas de emergencia y dicen "SALIDA" en hebreo, árabe e inglés. 
¿Puede ser ilegal rezar?

 

Artículo 18 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos

Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión; este derecho incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia, así como la libertad de manifestar su religión o su creencia, individual y colectivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia.

domingo, 27 de noviembre de 2011

Belén, Checkpoint 300 o sobre cómo frustrarse cada día

Si alguna vez antes de tomar un avión te quedaste 30 minutos en migraciones porque iba lento y te enojó... bueno, algo así pero todos los días de tu vida para ir a trabajar, extendido a cuatro horas y cuatro lugares...

3.45 am salimos de la casa para estar a las 4 am en el checkpoint 300 o conocido con el nombre de la colonia Gilo Checkpoint.
¿Qué es un checkpoint? Es un punto de control si lo traducimos directamente. Sería como pasar migraciones de un país a otro, en este caso para ir de Cisjordania (Belén) a Jerusalén, todo en territorio palestino. 
Checkpoint 300 es un lugar por el que todas las mañanas pasan alrededor de tres mil (sí, tres mil!) personas que vienen de distintos lugares del sur de Cisjordania a trabajar en Jerusalén.
No es que los horarios de trabajo son mucho antes, es que pasar este checkpoint puede ser un trabajo diario de cuatro horas o más o menos. Por eso el monitoreo comienza a las 4 am.
Es difícil explicar en un post qué es y cómo es un checkpoint, o cómo es este en particular. Entonces quiero ser clara pero breve. Comento un recorrido normal pero prometo que habrá más cosas que contar:
1. Palestino consigue trabajo en Jerusalén y vive en Cisjordania.
2. Tramita el permiso ante las autoridades israelíes que no siempre se lo darán.
3. Su jefe debe pagar impuestos por emplear a un palestino, lo cual suele negociar con el empleado y el empleador paga así un salario normalmente mucho más bajo de lo que le pagaría a un israelí por ese trabajo. Por eso lo emplea mayoritariamente. Pero esos salarios siguen siendo muchos mejores que los que el palestino puede conseguir en Cisjordania entonces no tiene opción que aceptar el trato.
4. El empleado -hablo de masculino porque suelen ser hombres que trabajan en la construcción por ejemplo- tiene que estar, imaginemos un caso, 6.30 am del otro lado del checkpoint para que -en algunos casos- lo busquen de su trabajo. Sino tomará un colectivo a Jerusalén.
5. El palestino llega al checkpoint quizás a las 2 am o 3 am para estar del otro lado a las 6.30 y no perder su trabajo ni su permiso.
6. A las 4 am debe abrirse el checkpoint para que pase, hace la fila que puede llevar horas y muestra su permiso al pasar.  
7. De ese primer paso una corrida a los detectores de metales donde habrá una larga fila nuevamente pero de un tiempo más limitado.
8. Se saca todo lo de metal y lo deposita en bandejas. 
9. Despues de los detectores de metales va a otra fila donde deberá mostrar su permiso, su documento y poner sus huellas digitales. Si estos tres documentos no se contradicen y si de repente no le han cancelado su permiso o es parte de una lista negra, puede pasar por la última puerta estará del otro lado del checkpoint.
Entonces para empezar su jornada laboral este palestino salió cinco o seis horas antes de su casa. No es lejos, desde Belén son sólo 10 KM. Y aún no empezó a trabajar.
No me animé a sacar fotos, me pareció horrible sacar una foto y creí que habría alguna. Acá les paso un claro ejemplo de la fila hoy por la mañana.
Hoy fue mi primer día monitoreando checkpoint 300. Si bien las mujeres normalmente pueden pasar por la línea humanitaria -una fila paralela-, hoy no abrió. Mujeres, niñxs, enfermxs y mayores de 65 años no pudieron pasar por donde deberían, tuvieron que estar horas esperando también o rogar piedad del soldado que a veces decide abrirle a alguien y a veces no.

domingo, 16 de octubre de 2011

Prensenciá los juicios a los genocidas

En estas fechas se está desarrollando en el TOF 5 (Tribunal Oral Federal N 5) de la Ciudad de Buenos Aires el juicio por la causa ESMA. No será el único porque son muchos más los casos que deben ser juzgados que los que allí se juzgan, así es que habrá más partes de la causa ESMA. Y hay muchas causas en todo el país.
Los juicios se pueden presenciar si unx es mayor de 18 años y hay que llevar el DNI o el pasaporte para poder ingresar a la sala. Este en particular se desarrolla en los Tribunales de Comodoro Py 2002, sala AMIA, en el subsuelo.
Ya está por la última parte y en breve se espera la sentencia.
Lo que quiero decir es que si no fuiste a presenciar uno de estos juicios es una experiencia realmente importante. Más aún cuando son las testimoniales, que es cuando dan testimonio las víctimas, porque a unx le da una dimensión real de lo que fue la última dictadura y de lo que es para nostrxs, todxs, hoy. Con todas sus consecuencias.
Tanto esperamos para que se haga justicia... Quizás esta justicia no sea lo mejor que pudo ser. La justicia cuando llega tarde ya ha perdido un poco, y tantos años han hecho lo suyo.
Si no fuiste a presenciar un juicio a los genocidas aún mi recomendación es que ante la duda vayas. No sólo por tu experiencia, si no también por las víctimas que siguen sufriendo, por lxs desaparecidxs, por la justicia de hoy y ahora que es tan necesaria para todxs.
Acá un mapa de los juicios hoy.