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miércoles, 2 de marzo de 2016

El error que termina en muerte es la ocupación

Suelo leer los diarios, y después de haber estado en Palestina, sigo las noticias sobre Palestina e Israel atenta.
Hoy Página/12 publica un artículo "Un error que terminó en muerte" para comentar un episodio en que dos soldados israelíes entran de noche en un campo de refugiados y son atacados.

El artículo obvia el contexto donde los jeeps israelíes con soldados armados para la guerra entran de noche en campos de refugiados y ciudades palestinas cotidianamente. Despertando a quienes viven en las casas, se llevan presos a sus habitantes sin órdenes judiciales, les tapan los ojos y atan las manos; a veces sólo lo hacen para amedrentar a las familias o como "ejercicios" militares: el ejercicio de amedrentar, maltratar y humillar a las familias palestinas en el medio de la noche. 

Quienes fuimos acompañantes en los territorios ocupados hemos visitado campos de refugiados casi a diario en algunas ciudades y siempre nos recibían sonrisas y abrazos de niños y niñas que viven en difíciles condiciones. Maestras y madres preocupadas por la seguridad de sus hijos e hijas nos contaban sobre las incursiones nocturnas de las fuerzas israelíes. Hemos visto niñxs aterradxs ante la presencia de soldados israelíes, con sus armas largas de guerra.
Nosotrxs no necesitábamos armas ni equipos de guerra para entrar porque íbamos a dar clases de inglés o a acompañar alguna actividad cultural o religiosa. Nos reconocían y nos invitaban a tomar té con menta y azúcar o un café en sus casas.

Los campamentos de refugiados existen desde 1950, son tantos que Naciones Unidas tiene una agencia específica: Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) y quienes hemos vivido en los territorios sabemos que cada día son más los desplazados de sus casas: desde el 48 los mayores, desde el 67 y cada día con la construcción del muro, las demoliciones de casas y tantas otras razones producto de la ocupación.

El error no es haber manejado en la dirección incorrecta, el error es seguir ocupando los territorios palestinos.  

sábado, 4 de febrero de 2012

Vivir atrapados (y algunos datos de la situación en Cisjordania)


Vivir atrapados podría ser el título de una película de terror. No es ficción. Es lo que le pasa a Al Walaja, un pueblo cerca de Belén que linda con Jerusalén y con dos colonias ilegales construidas por Israel: Gilo y Har Gilo.
Pero eso de vivir cerca de colonias ilegales es algo que le pasa a muchas ciudades en Palestina.
No los hace especiales.
Las colonias violan el derecho internacional humanitario por su sola existencia. Una idea fundamental de la ley de la ocupación es que la ocupación es sólo un estado temporario y que el poder ocupante por lo tanto, no puede hacer cambios permanentes en los territorios ocupados.”1
Desde 1967 a mediados de 2010, Israel estableció 121 colonias en Cisjordania que fueron reconocidas por el Ministerio del Interior (israelí) como "comunidades". Además, unos 100 outposts (colonias construidas sin autorización oficial, pero con el apoyo y la asistencia de los ministerios del gobierno). Además, doce barrios que se establecieron en las tierras anexadas por Israel en 1967 Jerusalén (Este).”2

domingo, 11 de diciembre de 2011

La llave en Aida Campo de Refugiados

En lo que es el distrito de Belén hay tres campos de refugiados, Aida es uno de ellos. Las fotos muestran dos entradas, en una se puede ver una gran llave que dice en inglés "NOT FOR SALE", que quiere decir, no se vende. 
Al Nakba, "la catástrofe", dejó a muchos palestinxs sin sus hogares de donde salieron un día, allá por 1948, cerraron la puerta de su casa, guardaron la llave y no han podido volver desde entonces.
La llave en la entrada de Aida representa esa esperanza y el derecho de volver a sus casas. Muchas familias guardan la llave ya por generaciones, con la idea de volver a ese hogar.